Estos últimos días, todo el mundo habla del nuevo gobierno de España, del “republicanismo de los ciudadanos” o de Philip Pettit el guru de ZP y a mí me apetece apuntar en otra dirección, antes de que este post quede trasnochado.
Verán. A lo largo de la campaña electoral hemos podido ver todo un despliegue de ideas, imágenes y mercaderías varias, ensayadas por todos los partidos, orientadas a hacerla más atrayente y divertida a los ojos del votante. Pero me van a permitir que elija unas imágenes que se han introducido de un tiempo para acá, por arte de la telegenia. Una, la del líder saludando al público y, la otra, la de los “guardaespaldas” apostados tras el susodicho jefe. Son, dos instantáneas de entre muchas, que con todo el respeto a los que en ellas participan, voy a puntear críticamente.
De siempre, o desde que yo estoy afiliado al PSOE (con sus más y sus menos), uno de los símbolos es el puño en alto, teniendo mucho cuidado de que sea el izquierdo, para que no te confundan con un comunista. Y, mira por donde, algunos candidatos nos han obsequiado con un cada vez más amplio abanico de posibilidades, que van y pasan por: la uve de la victoria, el OK, la mano abierta, el puño cerrado con el pulgar mirando al cielo y lo último ha sido utilizar el lenguaje de los sordomudos, para decir “presidente ZP”. Vamos, toda una serie y maneras de saludar al respetable, que en mi modesta opinión “entierra” la iconografía generada por nuestros mayores, para acabar siendo sustituida por las genialidades de los publicistas de campaña, previo convencimiento del “aparato” que les pagan, creídos éstos que es más moderno y eficaz.
Y, lo de los “figurantes” me tiene todavía aún más preocupado. Al parecer, se pretende dar una imagen fresca de un PSOE que luego no corresponde con la afiliación intergeneracional. Grave error electoral, puesto que aún menos coincide con el cuerpo electoral al que se le pide el voto y que contribuye mayoritariamente a las arcas del Estado.
En cualquier caso. Un PSOE innovador ha ganado y un PP desnortado ha perdido. ¡Será por el programa electoral! Digo yo.
De siempre, o desde que yo estoy afiliado al PSOE (con sus más y sus menos), uno de los símbolos es el puño en alto, teniendo mucho cuidado de que sea el izquierdo, para que no te confundan con un comunista. Y, mira por donde, algunos candidatos nos han obsequiado con un cada vez más amplio abanico de posibilidades, que van y pasan por: la uve de la victoria, el OK, la mano abierta, el puño cerrado con el pulgar mirando al cielo y lo último ha sido utilizar el lenguaje de los sordomudos, para decir “presidente ZP”. Vamos, toda una serie y maneras de saludar al respetable, que en mi modesta opinión “entierra” la iconografía generada por nuestros mayores, para acabar siendo sustituida por las genialidades de los publicistas de campaña, previo convencimiento del “aparato” que les pagan, creídos éstos que es más moderno y eficaz.
Y, lo de los “figurantes” me tiene todavía aún más preocupado. Al parecer, se pretende dar una imagen fresca de un PSOE que luego no corresponde con la afiliación intergeneracional. Grave error electoral, puesto que aún menos coincide con el cuerpo electoral al que se le pide el voto y que contribuye mayoritariamente a las arcas del Estado.
En cualquier caso. Un PSOE innovador ha ganado y un PP desnortado ha perdido. ¡Será por el programa electoral! Digo yo.
3 comentarios:
Yo creo que el PSOE ha ganado por los hechos y no por la iconografía. También es cierto que el PP en iconografía cero pelotero (y no cero patatero, que decía Aznar. Los de imagen les dijeron que el naranja era un color dinámico,juvenil y no agresivo como el rojo, y ahí está que lo aplicaron a todo, parecía ING. Les dijeron que había que hacerse el moderno con los tecnologías y copiaron el logo de Skype (que algunos de ellos ni sabrán de que se trata). En resumen unos publicistas con una jeta impresionante.
Lo de la ceja de ZP por lo menos era original, pero no más original que sus logros sociales.
En la era de la comunicación resultan determinantes aspectos varios. Uno logicamente que influye es la campaña de imagen, recordemos en los debates cara a cara como se milimetraron todos los detalles incluidos los minimos.
Salud y Progreso.
Hola:
Ulises, yo creo que el logo del PP se parece más al de OpenOffice que al de Skype.
Y si, me preocupa que la iconografía propia de un movimiento de masas como el socialismo, asentada a lo largo de muchos decenios ceda ahora tan facilmente, "por exigencias del guión".
La imagen es muy importante, pero también la que se asienta y nos recuerda de donde venimos.
Un saludo.
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