25/8/19

PSOE-PODEMOS: SOBRE LA HEGEMONÍA

La ceguera “podemita” no tiene límites. Se desangran electoralmente en cada nuevo comicio, no escuchan a los sindicatos más representativos y siguen con su infantilismo izquierdista. 

Es lógico que los socialistas estemos muy “cabreados” con Podemos pues, por dos veces  se ha impedido acceder a la Moncloa. Circunstancia ésta, que aun cuando una buena parte de la militancia socialista ve conveniente un gobierno de coalición -no así la Dirigencia-, tras lo sucedido a lo largo de este verano, se desinfla y mucho esta alternativa. Otros, hemos creído más en la fórmula a la vasca o a la portuguesa, pero los líderes a nivel nacional “podemitas” siguen enrocados “olvidándose” de que son obligatoriamente necesarios. ¿Motivo? 

La respuesta se encuentra en el documento interno denominado ‘Éramos pocos y llegó Sánchez’ (mayo de 2017). Ciertamente suena a risa pero personalmente y conociendo a esta rama de la izquierda, no me sorprende. Vamos, que “Ni comen ni dejan comer”. Guerra en la izquierda que no es nueva y si no repasemos algunos acontecimientos producidos en el siglo XX, que lamentablemente avalan los desencuentros entre comunistas y socialistas de ayer y de hoy. Por tanto, el objetivo y preocupación principal de Podemos por mucho que se hable de otras cuestiones, ya era en el 2017, no tanto echar a la derecha sino la victoria electoral de Pedro Sánchez. 

Así las cosas, ha quedado claro que al PSOE, lo de un gobierno de coalición a nivel nacional no le convenció mucho que digamos, ya que una buena parte de su permanente estrategia como partido, pasa por que Podemos pese cada vez menos. Por cierto, IU ya se ha dado cuenta de esta situación y empieza a marcar perfil propio. 

En definitiva, los “podemitas” no renuncian a ser los mayoritarios dentro de la izquierda -error-, y el PSOE los hegemónicos electoralmente dentro de las coordenadas del progresismo y la izquierda posibilista.  

En septiembre, una vez constituidos los Ejecutivos en las CCAA (ahí si se pueden hacer pluricoaliciones) hablaremos del Gobierno de España.

 

 

14/8/19

LA EQUIDISTANCIA

A menudo la equidistancia te hace perder el rumbo


Desde hace algunos días vengo recibiendo por diferentes canales la invitación de un grupo de ciudadanos autodenominados “Movimiento Ciudadano por un Gobierno Progresista y por la Izquierda”, qué en términos generales, puedo compartir gran parte de su manifiesto. Sin embargo y conociendo a más de uno de los que conforman dicho grupo y los fines que persiguen, que no es otro al parecer que no se repitan las elecciones autonómicas en La Rioja, tengo que decir que sí, que de acuerdo pero, hay algo que finalmente me retrae a difundir su reivindicación y mucho más el acudir a una rueda de prensa a celebrarse el día 14 de agosto, precisamente al café Moderno -recordemos que es lugar frecuentado por diferentes grupos de la izquierda y que coincide con el mismo edificio que alberga la sede regional del PSOE-. Me explico. 

Dice el texto del manifiesto en su parte que me hace no compartir su acción, lo siguiente: “Si te apuntas a EXIGIR a los partidos políticos que lleguen a acuerdos para formar gobierno”. Pues bien. En primer lugar, no se puede pasar por alto lo vivido semanas atrás en el Parlamento de La Rioja, donde Podemos votó contra la candidata a la Presidencia del Gobierno regional, la socialista Concha Andreu. En segundo lugar, todo lo que han publicado los diferentes medios de comunicación al respecto y en tercer lugar, lo dicho por la Portavoz de IU en La Rioja. Consiguientemente, esa maldita “equidistancia” que toman algunos ante lo sucedido, repartiendo “culpas” por igual, me parece equivocada, turbia y a la postre engañosa. 
No obstante y para aclarar. Soy, de los que siempre pongo en “cuarentena” lo que se cuenta a la salida de la mesa de una negociación y más, cuando en las deliberaciones no ha existido un fedatario, lo que se denomina “un hombre bueno”. Así que llegado a este punto, recuerdo lo dicho en otras ocasiones: “Se debe ser imparcial a la hora de juzgar los hechos, pero no neutral a la hora de tomar partido por lo que es justo.
Así que “compañeros de la equidistancia”. YO LO TENGO BASTANTE CLARO. Al pan, pan y al vino, vino.