El aborto como una cuestión nuclear del neonacionalcatolicismo español. Desde mi punto de vista internacionalista, el aborto debe ser legal, seguro y accesible para todas las mujeres del Mundo.
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De lo que estamos hablando esta semana es de una polémica cuya autoría en España pasa por Vox en Castilla y León, dejando una vez más ver a un PP arrastrado por la ultraderecha. Pero sería engañoso si no ampliamos el foco. Todo esto convienen inscribirlo también desde una visión global. Recordemos que el Tribunal Supremo de Estados Unidos dictaminó el pasado 24 de junio de 2022 que dejaba de proteger el derecho al aborto. Derecho que se logró en 1973 y cuesta creer que el grupo de presión que lleva décadas haciendo campaña para controlar los cuerpos de las mujeres, finalmente lo haya conseguido.
En nuestro caso, conviene
recordar que fue el PP quién presentó a través de 71 diputados en junio de 2010,
un recurso de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional contra la
ley de la interrupción voluntaria del embarazo.
Que el PP tiempo ha tenido en
su gobernanza en modificar la vigente legislación y que esta formación está
jugando peligrosamente con un derecho civil.
Pensamos que, si el PP a nivel
nacional quiere salir del enredo, lo que tiene que promover es que 50 representantes
del pueblo en las Cortes de España manden al carajo el recurso interpuesto por
sus correligionarios hace 13 años.
Señores del PP ¿Por qué no
dejan en paz a las mujeres? Y, o están con el derecho de las mujeres o están
con Vox.
Foto: Federico Trillo, Sandra Moneo y Santiago Cervera a su llegada al Tribunal Constitucional. 1 de junio 2010.
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