28/8/20

ÉTICA Y PRINCIPIOS


No es lo mismo ser indiferente ante un acontecimiento nimio, que ser indiferente ante aquello que a todas luces es injusto. Sobre lo primero puede que hasta te haya pasado inadvertido, pero seguramente que sobre lo segundo, ya es otra cosa. ¿A que sí?

Observo estos últimos días como afloran sentimientos encontrados en el mundo de la política unas veces muy explicitados, rayando lo esperpéntico, y otros más comedidos cuando no casi rodeados de cierta timidez en su exposición que me dejan pensativo. Y claro, me preocupa la falta de “sigilo profesional” que algunos políticos manifiestan, sin importarles mucho que hay otros que simplemente han sido compañeros de viaje, que se quedan perplejos al intuir además de lo dicho, un cierto corporativismo, otrora denostado por la izquierda, amén de un manifiesto lobismo.

En fin, que bueno es traer aquí y ahora lo que contestó el matemático Al-Juarismi  (fue un matemático, astrónomo y geógrafo persa que vivió aproximadamente entre 780 y 850) al ser preguntado sobre el valor del ser humano y este respondió: Si tiene ética entonces su valor es igual a 1. Si además es inteligente, agréguele un cero y su valor será igual a 10. Si también es rico, súmele otro cero y su valor será igual a 100. Si por sobre todo eso es además una persona de bello aspecto, agréguele otro cero y su valor será igual a 1.000.

Pero si pierde el 1, que corresponde a la ética, perderá todo su valor, pues solamente le quedarán los ceros.
Así de sencillo: sin valores éticos ni principios sólidos lo único que queda son delincuentes, corruptos y personas que no valen nada.

Ya se que tenemos que salvar las distancias pero, que atinado pensamiento de fondo.

9/8/20

¿SERÁ UNA ROSA? ¿SERÁ UN CLAVEL?

 Del tactitismo presidencial a la criptomanía del machaca. De la telegenia a la intrahistoria. ¿Pero no dicen que la historia la hacen las gentes? Ándense con cuidado, en este jardín también hay plantas trepadoras y carnívoras 

Me dicen que en La Rioja andan revueltas las aguas en más de una entidad político o social. Otros, me comentan que no es para tanto y los más, seguimos tirando como si tal cosa aporreando por las redes sociales, intentando vanamente luchar contra los mentirosos compulsivos, esos que se instalan en la verdad absoluta. Como diría aquel, puro entretenimiento. Pero, ahí seguimos con la testuz inclinada ante el teléfono móvil o frente al ordenador de sobremesa dejando dioptrías por segundo. En fin ¡¡Todo sea por la causa!! 

Recuerdo tiempos lejanos, cuando gastaba pantalón corto aquel estribillo que cantaban nuestras abuelas o nuestras madres que, arrodilladas en el suelo y a ritmo de fregoteo, se escuchaba aquello de "¿Será una rosa?, ¿Será un clavel? El mes de mayo te lo diré". La letra en cuestión hacía referencia, no a colores políticos como algún joven habrá pensado, sino, al embarazo. Eran los tiempos en que no había ecografías y los progenitores andaban dudando sobre el sexo del "nasciturus" hasta que se producía el parto. 

Con todo esto, dirán a donde quiero ir a parar. Pues bien. La cosa es que parece se está dilucidando algún que otro liderazgo y de cómo llevar adelante el proyecto, una vez que se ha perdido la confianza mutua de los que no hace tanto tiempo eran uña y carne.

En fin, viendo el presente, presagio luchas intestinas que salvo se diera un milagro -que todo es posible- y eleve la cuestión tan embarazosa a estadios estratosféricos, hoy, la verdad, mala pinta tiene.


7/8/20

LOS ACUERDOS DE LA UE

Está claro que en la Unión Europea sigue funcionando como siempre. Que si ponemos  “el poner el reloj a 0” y como nos las ingeniamos para siempre jugar al límite, lo que algunos dicen eso de, “asomarse al abismo” para luego dar marcha atrás. Pues eso, en esta ocasión confieso que yo era escéptico y la verdad prefiero haberme equivocado. Hubo “fumata” tal como cónclave vaticanista. 

Ahora, tras varios días de investigar y fundamentalmente escuchar a los que saben de esto, digamos que se perfila una nueva fase. Como dice Carles Manera en “La hormiga no es tan hormiga; la cigarra, tampoco” toca canalizar los recursos hacia proyectos que infieran cambios en los modelos productivos y que, junto a esfuerzos en los capítulos de formación y capacitación del capital humano, abran nuevas posibilidades a los mercados de trabajo. 

La confirmación de todo esto rubrica: que la Unión Europea ha aprendido de la Gran Recesión; que obstinarse en monsergas calvinistas y luteranas no lleva más que al desastre económico (como pasó en 2008 y siguientes); que alemanes y franceses han tomado también la lección, ya que su fortaleza reside en no debilitar las periferias. Y que, una vez más, la inversión pública va a ser un motor esencial. Todo bien conocido en otros momentos, pero que con demasiada frecuencia se olvida incurriéndose en los mismos errores que portan al precipicio. Errores de algunas hormigas que, con más modestia de la que exhiben, deberían contenerse ante las trayectorias de determinadas cigarras.


Así las cosas, y una vez escuchadas las cantinfladas de Casado, líder del PP, espero no dificulte las deliberaciones que ha de alumbrar los primeros PGE’20 de la era “sanchista”. Veremos.