Cuando algo se tuerce ¿Qué
hay qué hacer? Enderezarlo. Ya han pasado varias horas y muchos hemos seguido
las declaraciones de más de un socialista tras el resultado del Comité Federal
del PSOE. Yo no voy a reclamar con los Estatutos en la mano que todo lo que se
ha hecho se recurra ante la Administración de Justicia -que ganas dan-, sino
que creo firmemente que ahora, tras el golpe dado a la sacrificada militancia y
a importantes segmentos de los votantes, lo que toca como decía, es enderezar
lo hecho por algunos dirigentes. El PSOE tiene que trabajar urgentemente
en varios frentes, para desterrar algunas taras que hacen que estemos anoréxicos.
En lo ideológico hay que
popularizar el Programa Máximo que éste ha sido olvidado a conciencia, ya que
con la Transición se tuvo que consolidar un Estado Social y de Derecho como
pilar fundamental de una convivencia pacífica. Pero, que la alternancia
gubernamental y la partitocracia dada en las últimas décadas, nos haya llevado
a este punto, no es óbice para salir del socioliberalismo rampante de nuestros
líderes y de unas políticas socialdemócratas que en lo económico, ha quedado
claro que no tocan ni un ápice al sistema injusto del capitalismo.
Por consiguiente, ha llegado
la hora de que los militantes se aclaren y exhiban músculo socialista por
encima de las políticas eurosocialdemócratas desnortadas.
En lo intergeneracional y
viendo las fotos de cuando nos juntamos en asambleas o repasando quienes vamos
de interventores….etc, lo dicen todo. Somos un partido maduro donde los jóvenes
que aparecían en la época de ZP han desaparecido. No me digan donde están pero,
lo cierto es que hemos pasado de ser una organización intergeneracional a un
partido de mayores.
Esto queda corroborado por
el CIS donde los segmentos de menos edad están hoy por hoy en Podemos. Para dar
un cambio a esta situación hace falta mucha paciencia, líderes naturales desde
la base que atraigan a los jóvenes y nada de progresismo perfumado. Es la hora
de decir lo que queremos alcanzar. Justicia Social y emancipación.
En lo Territorial los socialistas
hemos debatido y así ha quedado claro en los documentos de Santillana y de
Granada, siendo este último el que tímidamente apela al federalismo. Pero
al federalismo no como un giro copernicano en la concepción del Estado y de la
soberanía, no como un nuevo modelo de distribución territorial del poder a la
suiza o a la canadiense, sino como una mera actualización y clarificación del
sistema autonómico.
Igual ha llegado la hora de definir claramente que federalismo queremos
los socialistas y más después de lo que viene ocurriendo en Cataluña y los
resultados autonómicos en el País Vasco.
Pero a estos tres temas para poder ser enderezados, es menester una militancia
que deje de estar con la autoestima por
los suelos. Factores importantes para salir de la misma serán: que para antes
de finalizar noviembre sepamos cuando se va a celebrar el Congreso extraordinario.
Ojalá a lo largo del invierno. Que en
las Agrupaciones Locales se administre la situación con planes organizativos donde
las heridas puedan cicatrizarse con el trabajo y donde la Dirigencia se baje del pedestal y vea al
afiliado no como un seguidor sino como un militante. Que la actitud en el
Congreso de los Diputados sea consecuente con el Programa Electoral con el que
nos presentamos y de concesiones al PP ni una. Si tienen que disolver las
Cámaras que las disuelvan.
Creo que soy claro.
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