Tener la misma ideología o formar parte de la misma “familia política” no tiene por qué impedir ante semejantes asuntos ciudadanos tener la misma postura. Ejemplo, los socialistas barceloneses están siendo muy críticos con el “Urbanismo táctico” impuesto por Ada Colau y los socialistas logroñeses están silentes a cuanto acontece por aquí. ¿Por qué será?
Algo como recordarán que vengo
reclamando allá donde puedo (la participación ciudadana), y que en gran medida
coincido con lo expresado por el hoy Decano del Colegio de Arquitectos de La
Rioja, cuando contesta al Diario LA RIOJA a resultas de la mutación de ciertas
calles sometidas al Urbanismo táctico lo siguiente:
“Llamarlo urbanismo me
parece muy exagerado; lo que se ha hecho es, a lo sumo, un estudio de detalle.
Tampoco veo apropiado denominarlo táctico porque no se ha acertado en nada.
Ando por la ciudad y me sorprendo diciéndome: este círculo no lo entiendo, a
qué obedecerá ese color, por qué aquí sí y allá no... No entiendo casi nada. El
pulso de la ciudad, y más con el impacto del covid-19, puede generar
situaciones en las que efectivamente pueden aplicarse de forma puntual
actuaciones que, en todo caso, no pasan sólo por trazos de pintura que generan
una confusión amplificada, además, al replicarse en otras partes de la ciudad.
¿Ha faltado pedagogía? Es que el urbanismo táctico ni es nuevo ni tan
complicado. ¿Que es barato? No es cuestión de dinero, sino de claridad. ¿Que no
será para siempre? Que digan su fecha de caducidad, quién es el autor para
exponerle las dudas, a quién se ha consultado antes”.
Así
las cosas, poco más que añadir, bueno, si me lo permiten echo en falta la
opinión del socialismo logroñés sobre lo realizado hasta hoy por el actual
Consistorio y deseo tomen nota del PSC de Barcelona y salgan de ese silencio
inexplicable.
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